La mujer tigra. Tecuanichan
Por Óscar Cortés Palma
Hace muchos años, vivía Tecuanichan, una mujer bonita. Bajaba al pueblo a seducir a los hombres. Seducidos la
seguían por el camino de Zotoltitlán. Los llevaba a su cueva, se convertía en
tigre, los mataba y se los comía.
Tecuanichan era una mujer tigra que
vivía en una cueva del cerro Kiauhtepec, cerro de la lluvia. Todas las noches las
calles eran inseguras, sólo la iglesia
era segura. La gente era indiferente, pasó mucho tiempo, poco a poco fue
acrecentando la violencia de Tecuanichan, en cada casa había un desaparecido.
Ante esto, los ancianos se
reunieron y dijeron:
-¡Ya estuvo bueno de tanto miedo! Ayunemos
y encontremos la solución.
Ayunaron, espiaron y dieron con
Tecuanichan, fueron a su cueva, entraron. Para su sorpresa era una mujer. Estaba
desnuda, acostada, durmiendo. Cerca de allí, estaba tirado su cuero de jaguar.
Atemorizados lo tomaron. Cuando la mujer despertó no pudo convertirse en tigre.
La agarraron y la llevaron al pueblo, la pasearon desnuda y murió de vergüenza.
Frente a la iglesia quemaron su cuero de
tigre.
Desde entonces, el pueblo de Apango vive en
paz y libre. Festejaron disfrazados de tecuanes, pues los jaguares
son los guardianes del pueblo. Y ofrendaron guajolotes en el pozo sagrado de la
cima del cerro de Oztotempa.
Texto: Óscar Cortés Palma
Mail: oscarcortespalma@gmail.com
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Extracto del libro <<Tecuanes y naguales>>
Casa de Cultura Tecuanes org., civil.
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