viernes, 30 de agosto de 2013

Los primeros veinte días de la revolución de Zapata -Del 2do viernes de cuaresma al 29 de marzo de 1911-.

Por Óscar Cortés Palma


En medio de la Feria del Segundo Viernes de Cuaresma en Cuautla, un grupo de personas que habían llegado de Villa de Ayala, platicaba animosamente. Nadie sospechaba que platicaran mas allá de lo que suelen platicar los amigos, pero en sí, se traían algo más  entre manos, uno de ellos mencionó:

-Ya tengo el nombramiento, es  hora de que empecemos la Revolución-



Posteriormente, se despidieron y se alejaron, confundiéndose entre la multitud de gente, pero al día siguiente se volvieron a reunir en Villa de Ayala, pero ahora no iban solos sino que iban acompañados de mas parientes y amigos.

-¡Hoy es el día no hay marcha atrás!-dijo el que parecía ser el líder del grupo.

Efectivamente, al anochecer, estos misteriosos sujetos desarmaron a la policía de la localidad, y convocaron a una reunión en la plaza del pueblo, allí uno de los oradores leyó el Plan de San Luis que convocaba a levantarse en armas, desconociendo al dictador Porfirio Díaz.

Sesenta personas de los presentes decidieron unirse a los insurrectos y junto con ellos partieron hacia un poblado cercano llamado San Rafael de Zaragoza, en donde los estaba esperando Catarino Perdomo y más adeptos.

De allí los campesinos insurrectos continuaron su camino, marchando siempre hacia el sur, instigados por Pablo Torres Burgos, quien era el líder visible del grupo, pasaron por las Serranías de Huautla hasta internarse en lo profundo de la sierra, en donde establecieron su campamento, y allí esperaron, una semana, escondidos a que llegaran más refuerzos a sumarse a su guerrilla.

Pero este grupo de campesinos insurrectos no era el único en la región, había grupos de campesinos que ya se habían levantado en armas, como por ejemplo Lucio Moreno, quien se había insurreccionado en Tepoztlan, Gabriel Tepepa quien tenía su guerrilla en Tlaquiltenango,  Ambrosio Figueroa quien estaba insurreccionado en Huitzuco; e  Isidro y Alejandro Casales quienes se habían sublevado por Tilapa y Chietla.

Bueno, en lo que nos concierne que es la guerrilla de Pablo Torres Burgos, este después de una semana de estar escondido en las serranías del sur de Huautla, entre los límites de los estados de Morelos y Puebla, decidió actuar, entonces al mando de sus guerrilleros que ya se habían incrementado a cerca de 150 personas, se dirigen a San Pablo Hidalgo, poblado cercano a Tlaltizapan. Allí en la casa de un ranchero llamado José Rodríguez, se reunieron el día lunes 20 de marzo de 1911, en esa reunión acuerdan atacar la ciudad de Jojutla y también se suman más guerrilleros a la causa.

Después de esa reunión Rafael Merino y Emiliano Zapata ,jefaturando sus grupos guerrilleros realizaron  maniobras el primero por la región de Jonacatepec y el segundo porla región Jolalpan–Axochiapan, era parte del plan, mientras estos distraían a las fuerzas federales Torres Burgos y Gabriel Tepepase preparon para caer sobre Jojutla, antes pasaron por Tlaquiltenango, poblado distante a solo 3 kilómetros de su objetivo, allí no hubo resistencia, y el poblado fue tomado sin utilizar una sola bala, era el día 23 de marzo de 1911.


Esto acobardó al gobernador del estado de Morelos, que había llegado un día antes en auxilio de la ciudad de Jojutla con un puñado de rurales, menospreció al enemigo y después recapacitó, viendo sus disminuidas fuerzas, decidió salir huyendo para refugiarse en la capital del estado.



Es entonces cuando los revolucionarios asaltan la Ciudad de Jojutla, que se encontraba completamente indefensa. Al no haber enemigo que perseguir las fuerzas de Gabriel Tepepa, robaron las tiendas, eso no le gustó nada a Pablo Torres Burgos quien era el comandante en Jefe del movimiento. Así que malhumorado le dijo a Tepepa que pusiera en orden a su gente, discutieron entre ellos.

Después llegaron Zapata y Merino, y en presencia de ellos y de los demás, Torres Burgos  renunció al mando del movimiento y se fue, alegó  que le escandalizaba la violencia y que sus órdenes no eran respetadas. Los demás observaban como Pablo Torres Burgos se alejaba, y ellos comprendieron que necesitaban un nuevo jefe.

Por lo mientras se internaron en las serranías poblanas que se encuentran al sur del estado de Morelos. Y empezaron a asaltar los poblados que allí se encuentran, Huachinantla, Mitepec, Jolalpan, Tlaucingo, Teotlalco hasta llegar a Axochiapan, Morelos.

Al llegar a cada pueblo, su comportamiento era el mismo, andaban buscando armas, caballos, partidarios de la causa, los invitaban a que se fueran con ellos, en estos poblados tan alejados y tan pobres, tan poco poblados, no hubo combates porque no había a quien combatir, no había destacamentos militares en la zona, solo había campesinos, que poco se diferenciaban de los campesinos insurrectos.

Otra  cosa que hacían los rebeldes en esos pueblos, era que solicitabanpréstamos para la causa a las personas ricas delos pueblos, también alteraban los Archivos y modificaban los documentos que les parecían oprobiosos, también destruyeron  los telégrafos, para que nadie comunicará sus movimientos y el gobierno no supiera donde estaban y que hacían.

Los pueblerinos simpatizaban con la revolución, por ejemplo en Jolalpan,cuando llegaron los rebeldes repicaron las campanas de la iglesia, tronaron cohetones, los fueron a recibir con música de viento, y gritaban: -¡Viva la revolución! secundando a los rebeldes, por eso, los campesinos insurrectos decidieron establecer su campamento allí, era un buen lugar porque aparte estaba rodeado de cerros que les brindaba protección.

Y allí eligieron a Emiliano Zapata como general, firmaron el Acta, 14 coroneles revolucionarios: Rafael Merino, Próculo Capistrán, Margarito Martínez, Catarino Perdomo, Jesús Morales, Francisco Mendoza, Gabriel Tepepa, Catalino Vergara, Juan Sánchez, Amador Acevedo, Emigdio Marmolejo, Jesús Jáuregui, y Maurilio Mejía.


Pablo Torres Burgoshabía muerto, así que Zapata ya era el nuevo Jefe, y tenía como 200 guerrilleros a su mando, ya que en Jolalpan se había unido Franco Pliego con más adeptos, en Huachinantla se había unido Amador Acevedo con dos decenas de partidarios, en Tlaucingo se unió Miguel Cortés con más reclutas.

En sí, en cada pueblo que pasaban se les unían partidarios, después continuaron para Axochiapan, poblado del estado de Morelos, allí también los recibieron como libertadores.

Allí estaba, Octavio Paz Solórzano, padre de Octavio Paz, el poeta, y se dio cuenta de que Zapata platicó con el Presidente Municipal y después con el cura del pueblo llamado Prisciliano Espíritu, quien era un cura revolucionario que le regaló un caballo a Zapata, lo aconsejó y le dio su bendición.

Después Zapata  se retirócon sus guerrilleros, pero no se fueron todos, se quedaron un pequeño grupo de revolucionarios comandados por Alejandro Casales, quien provenía de Chietla y se decía que había fusilado al Secretario y Presidente Municipal de Tilapa.

Así que, cuando los federales entraron a Axochiapan rápidamente lo capturaron, e inmediatamente después lo ahorcaron en un árbol de Mesquite y después lo quemaron.


La noticia pronto llegó a oídos de Zapata, quien se encontraba merodeando en las cercanías. Hasta ese momento Zapata no había participado en ningún combate, pues no es segura su participación en la toma de Jojutla porque lo habían enviado a realizar maniobras distractivas en los alrededores de Jolalpan a Axochiapan, pero en el caso de que si haya participado en esa batalla, participó como subalterno ya que el general en Jefe era Pablo Torres Burgos.

Es por eso que esta es la primera batalla de zapata, él la planeó, la organizó y la ejecutó. El 29 de marzo de 1911, en la Estación del Ferrocarril de Axochiapan, combatieron los guerrilleros comandados por Zapata que ya sumaban varios cientos de personas, contra los soldados de 18o. Regimientoal mando del Coronel Javier Rojas, finalmente estos se replegaron y huyeron, dejaron armas y  municiones que reforzaron los pertrechos revolucionarios.

Ese mismo día, Gabriel Tepepa atacaba la Hacienda de Chinameca, y se apropió de armamento y caballos, pero Gabriel Tepepa murió en las siguientes semanas, como también murió Rafael Merino, que sumadas a las muertes de los otros jefes revolucionarios como Pablo Torres Burgos y Alejandro Casales, dejaron a Zapata como líder indiscutible del movimiento revolucionario que se estaba gestando en el Sur.

© 2013 Óscar Cortés Palma Lic. en Historia UNAM e Investigador de la Danza del  Tecuan de Morelos y de la historia del poblado de Axochiapan. Email axochiapancultural@hotmail.com; cami17_4@hotmail.com